lunes, 12 de noviembre de 2007

Análisis del monopolio de la representación, comparación entre Chile y Estados Unidos.

La Concentración por Partidos, de la democracia.


Tanto en Chile como en Estados Unidos de Norteamérica se han desarrollado sistemas bipartidistas, en el caso norteamericano su evolución política los llevó a polarizarse tras dos tiendas políticas, y en Chile mas bien en manera de imposición dado nuestro sistema electoral vigente para las elecciones del poder legislativo.
Si bien en Estados Unidos el sistema es denominado Bipartidismo, y en Chile Binominalismo, ambos sistemas políticos constituyen una forma de monopolio de la representación política, es así como en la practica política norteamericana vemos que solo los dos grandes partidos políticos de este país alternan gobierno y mayoría en el poder legislativo, y en Chile, desde la vuelta a la democracia, existen dos grandes bloques políticos constituidos que luchan por el gobierno y la supremacía numérica en el poder legislativo.

En Estados Unidos los partidos que han monopolizado la práctica política son el Partido Demócrata (izquierda) y el Partido Republicano (derecha), desde 1853, cuando asumió la presidencia de este país el Sr. Franklin Pierce (Demócrata) que no ha existido ningún otro presidente de Estados Unidos, que no sea ni Demócrata ni Republicano, este dato nos prueba fehacientemente que en Estados Unidos, existe un sistema Bipartidista, ya que aún cuando existen otros partidos políticos, y la posibilidad legal de que estos existan, tales como Partido de la Reforma y el Partido Verde, no tienen representatividad pues el Partido Demócrata y el Partido Republicano tienen más del 95% de la representación territorial.

En Chile las dos grandes coaliciones políticas que han monopolizado la representación política desde 1990 en adelante han sido, la Alianza por Chile, compuesta por Renovación Nacional y la Unión Demócrata Independiente, dos partidos políticos de la derecha chilena, y la Concertación de Partidos Por la Democracia, compuesta por el Partido Socialista, el Partido Por la Democracia, el Partido Demócrata Cristiano, y el Partido Radical Social Demócrata, que vendrían a constituir una amalgama de partidos de centro e izquierda. La Concertación de Partidos por la Democracia ha ganado todas las elecciones presidenciales desde la vuelta a la democracia en Chile, cuatro gobiernos consecutivos, por su parte en el poder legislativo chileno, solo el año 2005 se rompió la lógica del Binominalismo, al ser electa diputada por la Fuerza Regional Independiente, Marta Isasi, lo que vino a romper con la exclusividad coalicionaria que existió durante 15 años en el parlamento chileno. En Chile al igual que en Estados Unidos, existen más partidos políticos aparte de los que concentran la representación, es así como partidos políticos históricos de nuestro país, hoy son llamados extraparlamentarios por su nula posibilidad de acceder a la representación, este es el caso del Partido Comunista de Chile, y en menor medida del Partido Humanista.

En el caso chileno a diferencia del caso Norteamericano, este sistema genera una gran sub representación pues los partidos y candidatos de la llamada Izquierda extraparlamentaria en ocasiones logran votaciones mayores que la Alianza por Chile o de la Concertación, pero por el sistema binominal de las elecciones parlamentarias ven impedido su acceso al poder de representación.
No así en el caso norteamericano, en el cual aún cuando los pequeños partidos pueden influir en la elección de uno o de otro candidato de los dos grandes partidos, como el caso de Ralph Nader en el año 2000 en el que se dice que resto votos de izquierda necesarios para la elección de Al Gore, la cantidad de representación que tienen es menor al 5% por lo que el daño que se genera de ciudadanos no representados y en consecuencia descontento social es mucho menor.

Hoy la disputa entre defensores del bipartidismo y sus detractores, gira entorno a la estabilidad que genera este, como se puede apreciar en el caso norteamericano, y la sub representación que así mismo provoca, como es observable en el caso chileno.